jueves, 17 de febrero de 2011

LAS TORTUGAS TAMBIÉN VUELAN (2004)


Esta excelente película narra la dura vida cotidiana de unos refugiados kurdos en la frontera entre Irán y Turqía que en 2003 esperaban que la inminente invasión norteamericana de Irak mejorara algo su situación.

Vale, ahora dirán que voy de culto/intelectual y hablo de pelis que no interesan a nadie y blah blah blah… Me da igual. Ya vale de tanto cine norteamericano. Esta coproducción entre Irán, Irak y Francia de 2004 se llevó montones premios y vale la pena conocerla.

¿Se necesita una campaña publicitaria de millones de dólares para hacer una película buena? Pues no, sobra con buenas ideas. ¿Sólo se hace cine interesante en Hollywood? Ni por asomo. Hay muchas otras maneras de hacer cine y contar historias. Ni mejores ni peores. Simplemente distintas. Mientras los directivos Hollywoodienese se gastan millones de dólares en historias vacías sobre vampiros adolescentes, adaptaciones de cómics o series de televisón, aún quedan historias humanas por contar. Aunque tengamos que buscarlas en Oriente Medio.

Que me enrollo. Este film del iraní Bahman Ghobadi retrata magníficamente las costumbres de un campo de refugiados, la convivencia con la guerra, las víctimas, el tráfico de armas, el trabajo infantil, la picaresca, las ganas de vivir, etc… Ante la adversidad más extrema es cuando el ser humano saca lo peor y lo mejor de sí mismo. Los protagonistas de este film son niños sin patria ni futuro que malviven con la guerra y la miseria, buscándose la vida sin perder (casi) nunca la sonrisa. Por muy duro que la guerra les haya golpeado, la vida sigue y ellos se adaptan de forma increíble. Pero ocurre que para algunos los golpes de la vida han ido demasiado lejos y ya no les queda ninguna ilusión a pesar de su corta edad.

Todo ello narrado con un buen ritmo y una dirección de actores genial. Los actores son niños (muchos de ellos víctimas reales de la guerra) que nunca antes habían actuado y sus interpretaciones destilan espontaneidad y realismo como pocas veces he visto en una película. A destacar el personaje de Satélite, uno de los más interesantes que he visto en años. Un joven que ha sabido sacar provecho de la situación de forma asombrosa, un buscavidas en toda regla.

OJO! Es una historia dura, muy dura, que no deja indiferente y que te remueve por dentro. Un film que emociona y conmueve sin remedio. Nada que ver con la ñoñerías que estamos habituados a ver. Hay escenas realmente dramáticas que se te quedan grabadas a fuego en la memoria. Pocas veces he temido tanto por la vida de un personaje en pantalla. Sin trucos de ninguna clase y con muy pocos medios, Ghobadi logra que nos identifiquemos con los niños y sintamos verdadero pánico ante los peligros que los rodean diariamente. Escenas como la de la bici son de cortar la respiración y apartar la mirada.

Existe otra realidad que no solemos ver en las pantallas y que es bueno que sepamos que existe.

8


2 comentarios:

Isabel dijo...

Esta película es durísima, desgarradora, me quitó el sueño esa noche. Muy buena crítica. Un saludo Luis Cifer.

YCC dijo...

Hola, yo también vi esta película, a pesar de que la vi en una versión pirata, era copia del original, así que me llego con material extra, donde se veía una conferencia de prensa, y el director decía que el mas pequeño de los actores que era ciego, gracias a la película había logrado recibir ayuda para su tratamiento.